En el mundo nuevo que nos permite avizorar la era del conocimiento hay un fenómeno de desmasificación. Lo vemos en cada cosa que observamos con atención.
Las empresas desarrollan políticas de “gestión orientada hacia el cliente” en reemplazo de la masificación que resultaba de la “gestión orientada al producto”. A tal fin puede verse que casi todos los artículos que compramos en supermercados tienen impreso en su envase un teléfono 0800. Una empresa que fabrica un millón de artículos por mes, distribuidos entre 100.000 clientes a través de distintas cadenas de supermercados, puede dar respuesta personalizada a cualquiera de esos 100.000 clientes que acerque una queja o reclamo. Una amiga compró un paquete de pañales y aparecieron tres de ellos con fallas. Llamó al 0800 donde le pidieron disculpas por el inconveniente, prometiéndole la reposición inmediata. Al día siguiente la llamaron para avisarle el número de despacho, le enviaron un paquete completo y pidieron el envío de los fallados.
El proceso de desmasificación es tal que la industria automotriz y cierta industria de la indumentaria están comenzando a hacer productos “a pedido”, sobre un modelo determinado combinando distintas partes dentro de una gama ofrecida. Esto es posible gracias a la robotización de los procesos. El tema se limita a cargar información a las computadoras.
A la política estos nuevos tiempos llegan trayéndonos el “voto electrónico”. Pero aprovechando estas ventajas tecnológicas hay que atreverse a pensar en un cambio mucho más profundo.
Tenemos que avanzar hacia la identificación biológica, como la impresión digital o el iris del ojo. De esta forma una “mesa” consiste únicamente en la terminal de computación custodiada por uno o dos guardias. Llega el votante a cualquiera de las terminales del distrito, la máquina lo identifica, verifica con la central que está empadronado y que aún no emitió voto, entonces lo autoriza presentándole las opciones. El votante presiona en la pantalla su voto, la máquina emite un ticket con el que el ciudadano acredita haber emitido su voto. NOS AHORRAMOS TODAS LAS AUTORIDADES DE MESA. Los partidos fiscalizarán el centro de cómputos que podrá brindar información al instante. Pero lo esencial del control residirá en la auditoria de sistema. Si el sistema está bien auditado no hay fraude posible.
Imaginemos inicialmente utilizar este sistema para plebiscitos, que son más fáciles de operar para el votante, reduciedndo las opciones a SÍ o NO.
Ya que no hay que desplegar nada mas que terminales, y éstas no tienen límite de horas de funcionamiento, una consulta popular podrá estar abierta a los votantes durante uno, dos o tres días, facilitando la concurrencia a votar sin colas. Como podría funcionar toda una provincia completa como distrito único, el votante puede asistir a cualquier terminal de de cualquier ciudad de la provincia a cualquier hora del día o la noche del período habilitado. Como la central o cabecera será única, su voto quedará registrado instantáneamente y jamás podrá haber doble emisión. Es como ir a un cajero automático. Pero además, como la identificación es biológica nadie podrá falsear identidades.
¿Dónde instalar las “máquinas de votar”? Estamos acostumbrados a saturar de gente y ensuciar las escuelas de todas las localidades en cada elección. Esto será un asunto muy diferente. Cualquier lugar que esté abierto al público puede utilizarse para instalar la máquina, tales como locales que agrupan conjuntos de cajeros automáticos, hipermercados, oficinas públicas, etc.
Hasta podrían quedar instaladas permanentemente.
Un sistema así puede convertirse en una herramienta útil para el ejercicio de una democracia más plena. El bajo costo y la rápida ejecución de una consulta permitirá el más alto grado de participación de la ciudadanía en las decisiones trascendentales del gobierno. Así también sirve al gobernante para respaldar y legitimar sus actos cuando lo crea necesario, acotando y neutralizando la presión de las minorías prepotentes y algunos interesados medios de prensa.
Para ello habría que instituir un sistema de consultas absolutamente vinculantes. No se puede consultar al soberano para después hacer otra cosa.
ESTO SERÁ UN VERDADERO SALTO CUALITATIVO EN
Comentario hecho a Jorge Ludovico Grillo
ResponderEliminarhttp://ludovico.com.ar/?p=17
...por alguna razón quedó trunco mi comentario anterior... Espero que te haya llegado.. esencialmente te decía que soy un convencido de las bondades del voto electrónico, y ya que opinás lo contrario, acá estoy para poner a prueba lo que pienso. Cómo veo el acto de emisión de un voto en el futuro.
1 - Llego al lugar que elegí para votar, me paro frente a la máquina, le presento mi impresión digital, el sistema conectado a una central me identifica, confirmo mi identificación, chequea que estoy empadronado y que aún no emití voto, me autoriza a votar.
2 - A continuación me presenta las opciones de voto que corresponden a mi domicilio. Emito mi voto (o mis votos).
3 - La máquina imprime un comprobante dividido en dos partes: una pública que acredita que yo voté. Otra privada que me certifica a qué opción fue sumado mi voto. Esta parte me permite verificar en el futuro en la Justicia Electoral (en un archivo que sólo podrá ser desencriptado por mí, con mi identificación biológica) que mi voto no haya sido modificado.
4 - Como quien me identifica en esta "mesa electoral" es la máquina, no hacen falta autoridades de mesa, sólo custodios.
5 - El acto eleccionario comienza el Sábado a las cero horas y cierra a las 23:59 Hs. del Domingo. En caso de necesidad la Justicia Electoral puede extender el horario.
6 - Todos los partidos integran con sus técnicos la Comisión Auditora que analizó y aprobó el sistema y monitorea el funcionamiento durante el acto.
7 - El método de Distrito Abierto permite al votante emitir su voto en cualquier lugar, por lo que no tiene que viajar. La amplitud horaria minimiza colas y no quita tiempo al trabajo. Excepto en las zonas rurales, donde el horario es diruno y las máquinas no están en red sino que constituyen módulos autónomos que vuelcan sus datos a la red luego de finalizar el acto al al llegar a una ciudad.
8 - ¿Dónde instalar las “máquinas de votar”? Cualquier lugar que esté abierto al público puede utilizarse para instalar la máquina, tales como locales que agrupan conjuntos de cajeros automáticos, hipermercados, oficinas públicas, incluso escuelas. etc. Las máquinas tendrán custodia propia, lo que permitirá mantener abiertos los lugares durante todo el tiempo que dure el acto.
9 - Desaparece el concepto de MESA. Una máquina es un lugar donde puede ir cualquier ciudadano empadronado a emitir su voto.
10 - Dada la amplitud de horarios, la cantidad de "máquinas de votar" será sensiblemente menor a las 73.000 mesas (repito dato de Ludovico) que se instalan en el pais. Si fueran 50.000 y costaran lo que una PC o una mini notebook vendida al público ($2000) La inversión sería de unos cien millones. Mas otro tanto de redes y centros de cómputos. Mas otro tanto de soft. Amortizado en ocho años de uso (dos períodos de gobierno) representa aproximadamente un peso por año por habitante. EL COSTO, AUNQUE QUINTUPLIQUE ESTA ESTIMACIÓN, NO PARECE SER EL PUNTO DÉBIL DEL PROYECTO. Por estas razones creo que hay un método posible, económico, ágil y transparente de implementar un voto electrónico útil para la sociedad. La elección de autoridades es sólo uno de los aspectos a mejorar con este sistema, pero lo más importante, lo verdaderamente revolucionario consiste en la posibilidad de instauración de la consulta popular frecuente como una forma de gobernar. Es el verdadero método participativo que podrá suplantar o contrarrestar al asambleísmo infantil de algunos dirigentes que utilizan como método de presión.
Omar:
ResponderEliminarHe publicado mi respuesta en:
http://ludovico.com.ar/?p=17&cpage=1#comment-221
Sds
Ludovico
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ResponderEliminarHola Ludovico: Me alegro que no te opongas al sistema de voto "computarizado". Entonces te considero un partidario a futuro. Aprecio tus comentarios sobre los inconvenientes. No tanto sobre el costo. Sino de todo lo otro. Mi preocupación es que pretenda instaurarse un mamarracho con una computadora y se termine incurriendo en malversación de la idea (y de algunos fondos) por cortedad de miras o por oportunismo desaprensivo, tan común en acciones de gobierno. Por eso lanzo un planteo amplio, para cuyo desarrollo hay suficiente gente capacitada en el país. Lo mio es inducir a pensar en grande cuando se hable de voto electrónico. Yo no lo veo imposible en absoluto. Hay hechos sorprendentes que nos ubican en posiciones destacadas, y refuerzan mi fe en nuestra capacidad. Por ejemplo:Muy pocos lugares en el mundo tienen wifi público libre, sin embargo una provincia nuestra de las menores sí lo hizo.
ResponderEliminarLO POSIBLE SE DA POR HECHO...LO IMPOSIBLE HAY QUE INTENTARLO (dicen que lo dijo Alfredo Fortabat)